Precio limpio

El precio limpio (también conocido como precio plano) de un bono es el precio que no tiene en cuenta los intereses acumulados sobre el bono desde su última fecha de pago. Es igual al valor presente de los flujos de efectivo futuros del bono menos los intereses devengados por el bono entre la fecha del último pago y la fecha de la transacción.

La mayoría de los mercados financieros (particularmente en los EE. UU.) cotizan bonos a sus precios limpios. Los intereses devengados se vuelven a sumar al precio cotizado para determinar el precio de liquidación, es decir, la contraprestación que el comprador paga al vendedor a cambio del bono.

Fórmula

Si tenemos el precio sucio y los valores de interés acumulados para un bono, podemos encontrar el precio limpio usando la siguiente fórmula:

Precio limpio = Precio sucio − Interés acumulado

El precio sucio es el valor actual de los pagos de cupones futuros y el valor de vencimiento del bono determinado mediante la siguiente fórmula:

Donde c es la tasa de cupón periódica, F es el valor nominal, r es el rendimiento periódico al vencimiento y n es el número total de pagos de cupón.

Los intereses acumulados se pueden calcular utilizando la siguiente fórmula:

Donde F es el valor nominal, C es la tasa de cupón anual total, m son los pagos de cupón por año, D son los días desde la última fecha de pago y T es el número total de días entre pagos de cupón.

Ejemplo

Considere los hechos proporcionados en el ejemplo del artículo sobre precio sucio.

El precio sucio se calculó en $1,051.05 siendo el valor presente de sus flujos de efectivo futuros. Para encontrar el precio limpio, debemos restar el interés acumulado del precio sucio.

Precio limpio = $1051,05 − $15,26 = $1035,8

Precio limpio según nuestro cálculo, es decir, $1035,8 ≈ precio cotizado por Morningstar, es decir, $1036,1