Liquidación de Dividendos

Los dividendos de liquidación son dividendos pagados en exceso de las ganancias acumuladas de una empresa. Están destinados a liquidar total o parcialmente la empresa. Contablemente, no se reconocen como ingreso por parte del inversionista sino como una reducción del valor en libros de la inversión.

Es importante distinguir entre dividendos ‘normales’ y dividendos de liquidación porque tienen un tratamiento contable diferente. Mientras que los dividendos convencionales son registrados por el inversor como un ingreso de su inversión, los dividendos de liquidación no se registran como un ingreso sino como un rendimiento de la inversión. Cada bloque de acciones adquirido debe tratarse por separado y las ganancias acumuladas desde la adquisición deben considerarse únicamente para determinar si un dividendo es un dividendo ordinario o un dividendo de liquidación.

Debido a que los dividendos de liquidación son efectivamente el reembolso de la inversión, por lo general no tienen las mismas implicaciones fiscales que los dividendos ordinarios.

Ejemplo

La empresa A compró una participación del 10 % en la empresa B por 120 millones de dólares.

Debido a que una participación del 10% no muestra influencia significativa ni control, debe registrarse utilizando el método del costo (también llamado método del valor razonable).

La siguiente tabla muestra la utilidad neta, las ganancias acumuladas y los dividendos declarados de la Compañía B durante los últimos cinco años (todas las cantidades en USD en millones):

Durante el primer y segundo año, la utilidad neta fue de $14 millones y $12 millones respectivamente, y los dividendos declarados ascendieron a $13 millones y $12 millones respectivamente. Dado que los dividendos se pagan en su totalidad con cargo a los ingresos netos del año correspondiente, todos son dividendos ordinarios y la Empresa A debe reconocerlos como ingresos. El asiento contable del primer año sería:

En el tercer y cuarto año, los dividendos declarados excedieron los ingresos disponibles. Solo los dividendos pagados con cargo a la utilidad neta del año correspondiente o cualquier utilidad acumulada disponible desde la adquisición del bloque de acciones se reconocen como dividendos ordinarios y el resto se reconoce como dividendos de liquidación. El siguiente asiento de diario debe hacerse en el tercer año: