Brecha de expectativas

La brecha de expectativas es la diferencia entre la percepción pública del rol y las responsabilidades de un auditor con respecto a los trabajos de auditoría y cuáles son realmente las responsabilidades legales del auditor. Los usuarios de los estados financieros a menudo creen que los auditores son responsables de prevenir y detectar todos los fraudes y que prueban las transacciones y los saldos de manera más exhaustiva de lo que es la práctica real.

La brecha de expectativas se puede clasificar en:

  • Brecha de desempeño, es decir, la diferencia entre el nivel de trabajo que un auditor debe hacer según las normas de auditoría y lo que el público cree que debe hacer.
  • Brecha de responsabilidad , es decir, la percepción errónea con respecto a la responsabilidad legal del auditor.

El proceso de auditoría tiene ciertas limitaciones. Por ejemplo, los auditores emplean muestreo, probando así un subconjunto de transacciones en lugar de probar todos los registros durante un año financiero. Existe la posibilidad de que una muestra elegida no represente realmente a la población con la que se relaciona. Otra razón es que parte de la evidencia disponible para el auditor es persuasiva pero no concluyente. Por lo tanto, la opinión de un auditor implica juicio y existe una rara posibilidad de que la opinión dada sea falsa, por ejemplo, la opinión de que los estados financieros están libres de incorrección material, pero en realidad contienen incorrección material.

Debido a estas limitaciones del proceso de auditoría, es imposible que el auditor proporcione una garantía absoluta de que los estados financieros reflejan las circunstancias exactas y precisas de una empresa.

La brecha de expectativas es a menudo la razón por la cual las partes interesadas, como los inversores, pueden demandar a un auditor porque sufrieron una pérdida al confiar en los estados financieros auditados.

Recientemente, ha habido un esfuerzo por parte de la profesión de auditoría para educar a los usuarios de los estados financieros sobre el papel y las responsabilidades del auditor. El informe del auditor ahora enumera las responsabilidades respectivas de la gerencia y los auditores de una empresa. Por ejemplo, la responsabilidad de prevenir y detectar el fraude recae principalmente en la administración de la empresa, mientras que se espera que los auditores detecten solo aquellos fraudes que tengan un impacto material en los estados financieros.

Otro enfoque para cerrar la brecha de expectativas es entablar una comunicación abierta y clara con los encargados del gobierno corporativo, es decir, los directores de la empresa auditada. Los estándares de auditoría también pueden hacerse más completos con métodos mejorados para expandir el alcance del trabajo realizado por los auditores, reduciendo así la brecha de expectativas relacionadas con el desempeño.